Fernando Rospigliosi, miembro del equipo técnico y vocero de Fuerza Popular, afirmó que en el Perú no existen un movimiento indígena y es un invento de algunos intelectuales y organizaciones no gubernamentales (minuto 54:17).
Las declaraciones se efectuaron en el marco de un debate organizado por el Institute of Latin American Studies (ILAS) de la Universidad de Columbia, en New York, Estados Unidos.
El debate Tendiendo Puentes, también recogió las declaraciones de Betsy Chávez, congresista electa y vocera de Perú Libre, agrupación que postula a Pedro Castillo a la presidencia de Perú.
Betsy Chávez sustentó la necesidad de una nueva Constitución Política que refleje la diversidad cultural existente en el país y forjar un modelo propio sin exclusiones.
Cuestionó duramente la Constitucion Política de 1993 permisiva con la corrupción. Enfatizó la necesidad de una Constitución incluyente, que incorpore a todos los sectores, y no solo los de la Capital del Perú.
Como primera política pública propuso la reactivación con salud y acentuó la dotación de oxígeno y la vacunación. Respecto a la reactivación económica planteó la «economía popular con mercados» para una renegociación tributaria.
Perú sigue la «tradición ibérica»
Rospigliosi sostuvo que la supuesta necesidad de cambiar la Constitución es un mito que nace de la tradición ibérica donde «las normas se acatan, pero no se cumplen»; y que es muy distinta de la tradición anglosajona.
Para Rospigliosi, la corrupción no tiene nada que ver con la Constitución ni las leyes, sino con el sistema de justicia y con la gestión pública.
Rospigliosi acusó a Perú Libre de querer instaurar un régimen estatista, chavista y seguir el modelo venezolano.
El vocero fujimorista criticó duramente a las organizaciones sociales, sindicales y populares, a las que calificó de «estar en ruinas» y ser falsamente representativas, a las que se quiere utilizar para una falsa Constituyente.
Fernando Rospigliosi, quién ha sido ministro del Interior en dos ocasiones durante el gobierno de Alejandro Toledo, explicó que la expectativa de cambio en la población responde a una frustración por la gestión. Insistió en que la población quiere «trabajo y salud».
Ante el pedido de los organizadores de manifestar puntos de acercamiento Rospigliosi insistió en la dificultad de hallar puntos de entedimiento con el «marxismo leninismo mariateguismo» por ser antidemocrático.
Perspectivas democráticas y antidemocráticas
Sobre el respeto a la institucionalidad democrática Betsy Chávez cuestionó que Keiko Fujimori respete compromisos considerando que en 2016 tuvo una holgada mayoría parlamentaria (73 de 130 congresistas).
Entonces, la bancada de Keiko Fujimori –no de Alberto Fujimori– se dedicó no a proponer reformas constructivas para el país, sino a interpelar y censurar ministros y boicotear la gestión del gobierno en funciones.
Rospigliosi advirtió que el próximo Congreso estará muy fragmentado y habrán muchas presiones para imponer la reforma constitucional por lo que vendrá mucha inestabilidad e incertidumbre.
